Sinceramente, me lo pregunto todos los días a la vuelta del trabajo. ¿Existe realmente la conciliación en España? En mi opinión, como padre, joven, formado y primerizo, NO. Rotundamente NO. A nadie le importa, es algo que ni se plantea en la gran mayoría de las empresas en las que he estado y por tanto, entiendo, que es algo extensible a toda España. Solamente me he encontrado un sitio donde realmente se ponga en valor a la relación familiar y al tiempo de padres e hijos: fuera de España. Estuve trabajando fuera de España tres años y pude comprobar que estamos muy, pero que muy, atrasados en ese asunto.
Es algo que me cabrea soberanamente y os voy a explicar por qué.
¿Podéis trabajar los dos?
O mejor dicho, ¿podéis NO trabajar alguno de los dos? (Papá o Mamá). La realidad de muchas familias en España es que los sueldos no dan para más. Hace poco leía que el gasto medio de una familia con un hijo era de 29.000€ al año (según comunidad autónoma) y yo me pregunto, ¿Cómo demonios se hace? No lo entiendo, el dinero no estira y los gastos con un niño pequeño son infinitos. Imagina con dos….el acabose.
Por tanto en muchas familias tienen que trabajar papá y mamá. Los dos, a la vez, y mucho. No hablo de vivir con lujos, hablo de sobrevivir y no estar preocupado por el fin de mes. Esto, obliga a que los pequeños tengan que quedarse con algún familiar o en la guardería. Empezamos a gastar, con lo que lo comido por lo servido cuando tienes que pagar guardería. ¿Pero y qué hay de la crianza? Te matas a trabajar para pagar una guardería y además de perder parte del sueldo, pierdes lo bonito de la crianza de tus hijos.
No es sólo eso, cuando empiezan al colegio parece que te liberas un poco más pero es aún peor, los gastos siguen en aumento y tu sueldo apenas se mueve (da gracias que no baje). Los horarios son incompatibles con muchos trabajos, empezamos a sufrir estrés, ansiedad y a estar tensos e irritables con nuestra familia. Yo me pregunto, ¿es esto necesario? ¿Se puede evitar? Claro que sí, solo hay que querer y poner voluntad. Avanzar hacia una sociedad desarrollada y evolucionar.
En muchas casos, sucede que alguno de los dos padres tiene que dejar su trabajo, ir al paro, solicitar la reducción de jornada o sin más pedir una excedencia. Esto en muchos empleos no es posible con lo que a menudo se pierden los puestos de trabajo para cuidar a los hijos. Y yo sinceramente, no lo veo mal. Para mí lo principal es la familia y mis hijos. El trabajo no es un fin, es un medio. Y yo no le debo nada a nadie en mi empresa. Con lo que soy libre de decidir si puedo o no estar tres años con mi bebé sin trabajar. Realmente, esto lo decidirán los ahorros de la familia.

¿Por qué es tan difícil conciliar?
Yo tengo muchas teorías, pero la principal es porque a las empresas no les da la gana. Parece que estés robándoles o incluso excediéndote al solicitar una reducción de jornada, excedencia u horario flexible. Digan lo que digan, les parece mal. Y lo peor, es que a los compañeros que no tienen hijos, también. Pasas a ser el bicho raro de la oficina. “El que quiere pasar tiempo con sus hijos” Pues sí y cuanto más mejor. Porque la empresa no es mía y si lo fuese quizá sería más flexible.
Aún no logro entender cómo muchas empresas son incapaces de realizar horarios flexibles para aquellos trabajadores / as que tienen hijos pequeños. ¿Realmente saben lo difícil que es llevarles al colegio, ir a comer todos juntos o por la tarde pasar un ratito familiar con ellos? No sé si lo saben, pero les da igual. Arréglate como puedas y no me cuentes tu vida. Cumples tu horario y no te mueves de aquí, es inamovible e inflexible. Y así no pueden ser las cosas. Necesitamos empresas flexibles, empresas que apuesten por el futuro, por el bienestar de su plantilla y retengan talento. #notodoesdinero
La solución principal es el teletrabajo (posible gracias a la tecnología) y los horarios flexibles. Sí, ya lo sé, en muchos trabajos es imposible. ¿O quizá no…?
En mi caso personal, llamé al departamento de recursos humanos donde trabajaba para preguntar por la flexibilidad horaria y ¿la respuesta sabéis cual fue?: No hay, que pida tu mujer la reducción de jornada que tiene preferencia. Sólo por ese detalle y porque me niego a no llevar a mis hijos al colegio y a verles 20 minutos por la tarde antes de acostarse, ME VOY. Renuncio, no a la conciliación de las malasmadres, ¡claro que no! Renuncio a una empresa retrógrada, anclada en el pasado y que sobretodo no cumple aquello que busco: la atención a la familia, por encima de cualquier cliente, reunión o proyecto. Lo siento, pero no hay cliente más importante que mi familia. Y el que no lo entienda que se apañe. Una de dos, o no tiene hijos o directamente no les presta la atención que debiera.
La solución: Emprender y reinventarse. Ser el dueño de mis horarios y de mi día a día. Porque nadie me quita de trabajar de 21:00 a 6:00 de la mañana o un domingo por la tarde. Pero yo a la función de navidad de mis hijos PIENSO ASISTIR. ¿Y tú?
Cris Rodríguez
– Mami fundadora y creativa de la firma de ropa para bebé hecha a mano capotinas.com –

Es algo por lo que nos debemos unir padres y madres, incluso los jóvenes que lo serán, los abuelos que ayudan pero notan la ausencia insustituíble de un padre. Porque para educar y hacer ciudadanos de una sociedad mejor necesitamos estar los padres. Estoy segura que todos tenemos una experiencia por el estilo que acarrear. Nos perdemos muchos momentos irrepetible de la vida de nuestros hijos, pero también nos perdemos esos días en que enfermos necesitan curarse en nuestros brazos, pero si no están ingresados no le importa a nadie. Déjalos teniendo fiebre con un amigo o con cualquiera porque nadie lo entenderá en el trabajo y hay que trabajar. Unirse, luchar por mejores derechos, porque no todos podemos dejar lo que tenemos ( aunque admiro mucho a quien ha podido y no se ha dejado pisar) y a compartir estos temas para hacer más visible que lo que está mal, aunque acostumbrados a ello, se debe y puede cambiar.
Muchas gracias por tu comentario Evelyn! Efectivamente, la conciliación laboral y familiar es algo importantísimo, especialmente porque como dices, hay momentos irrepetibles en la vida de nuestros hijos. Sobretodo cuando son pequeños.
Un besito,
Muchas gracias,
Cris